Hoy en dia me di cuenta, que mi vida no era como la de mis amigos... Que ellos contaban sobre lo felices que vivian y lo felices que eran sus padres, pero yo no podia hablar asi, mi madre trabajaba mucho y casi no la veia, sin embargo era ella quien me cuidaba, quien velaba mis sueños, quien me apoyaba en todo, y con quien mas convivia, ella era todo para mi, en cambio mi papa, era una mala persona, siempre tomaba y cuando llegaba solo golpeaba a mama, y yo, con mi pequeño cuerpo me sentia tan impotente que no sabia que hacer mas que encerrarme en mi armario y llorar hasta quedarme dormido...
Pero hoy, por la tarde me la pase rebuscando entre el ascritorio de papa, entre su estudio, y en uno de los cajones encontre una pistola envuelta en un pañuelo, cuando la agarre me resultaba muy pesada, y fria, el simple contacto me hizo estremecer, la subi a mi habitacion y la guarde bajo mi cama, lugo me quede dormido hasta que los gritos de dolor de mama me despertaron, baje corriendo pero no habia nadie abajo, asi es que decidi entrar al cuerto de mis padres, y mi mama estaba tirada en el suelo y mi papa estaba parado frente a ella, procure no hacer el mas minimo ruido para que no se diera cuenta, regrese a mi cuarto por el arma y me tambalee un poco, pero logre quedarme en pie, camine sigilosamente hasta la habitacion y mama no dejaba de llorar...
Estire las dos manos y apunte hacia papa, mis debiles brazos apenas soportaban el peso del arma, no lo pense dos veces y mi dedito presiono el gatillo con todas mis fuerzas obtenidas del coraje, la bala salio disparada y el sonido me lastimo, provacando que cayera el suelo, cuando me reincorpore mi padre estaba tirado completamente innerte y mama grito de terror, pues era casi increible que un niño de cinco años hubiera asesinado a su padre a causa del maltrato...
-Que hiciste- me pregunto mama con un hilillo de voz, yo me pasme y no pude decir nada ante la situacion, solo comenze a llorar en cuanto cai en la cuenta de lo que habia hecho- no te preocupes ya todo paso, saldremos de esto pronto, no te asustes, tu no tienes la culpa de nada- decia mama entre zollosos
-Perdon- me limite a decirle recargada en su pecho meintras soltaba el arma que cayo de mis manos con un chasquido sobre la alfombra...
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